"Si los paneles solares y la parsimonia de un molino de viento lo consiguen, ¿qué no podrían hacer las ruedas de un coche a toda marcha? Todavía no hay desarrollo definitivo ni fecha de comercialización, pero las gomas bautizadas BH-03 (diseñadas por Goodyear) son capaces de transformar el calor y las vibraciones en fuente directa para las baterías de los motores eléctricos y para otros elementos del vehículo que lo necesiten.
El prototipo del fabricante de neumáticos necesita temperatura y movimiento para sacar partido de sus dos compuestos principales. Por un lado, el material termoeléctrico del que está hecho convierte en electricidad todo el calor generado por la rueda, ya sea en marcha (por la fricción constante) o en reposo (mediante una textura ultranegra que absorbe toda la luz solar que puede); por otro, el material piezoeléctrico transforma en energía eléctrica las vibraciones producidas por la deformación de la rueda en su intensa relación con el asfalto. Con esta alimentación constante, probablemente la autonomía de los motores más limpios y silenciosos deje de ser un problema".