Una empresa de Pekín ha desvelado diseños espectacularmente futuristas para un autobús elevado y no contaminante, capaz de deslizarse por encima de los enormes y terribles atascos por los que se ha hecho famosa la China urbana. Los planos para el denominado Transit Explore Bus o TEB se expusieron este mes en una feria tecnológica en la capital china.
El autobús, que pertenece más a Blade Runner que a las autopistas llenas de coches de China, se apoya en dos piernas que recorren raíles desplegados sobre los arcenes. Esas piernas permiten que el marco gigante del TEB se deslice muy por encima del atasco a velocidades de hasta 60 kilómetros por hora. Del mismo modo, los vehículos que midan menos de dos metros de alto podrán conducir con libertad por debajo del autobús, incluso cuando esté parado.
"La mayor ventaja es que el bus ahorrará mucho espacio en la carretera", ha explicado el ingeniero jefe del proyecto, Song Youzhou, a la agencia oficial de noticias china, Xinhua. Song ha asegurado que sus autobuses, capaces de transportar a hasta 1.400 pasajeros, se podrían producir por el 20% del precio de un tren de metro e instalar mucho más rápido porque la infraestructura de apoyo es relativamente simlpe. Ha señalado que un TEB podría sustituir a 40 autobuses convencionales.
Según se ha informado, se montará un prototipo este verano en las calles de Qinhuangdao, una ciudad costera a unos 300 kilómetros al este de Pekín. El proyecto ha tenido una acogida anticipada en China, donde los atascos han crecido. El país sobrepasó a Estados Unidos en 2009 y se convirtió en el mayor mercado de coches del planeta. Solo el año pasado se vendieron 21,1 millones de turismos.
Sin embargo, la emoción por esta innovación se ve moderada por el hecho de que un artilugio casi idéntico se desveló en la misma feria en 2010 y no triunfó. ¿Su diseñador? Un ingeniero chino llamado Song Youzhou.